Nombre: Natalia Lionheart
Sexo: Mujer
Raza: Aasimar
Edad: 25
Deidad: Azura
Clase: Paladina/Clériga
Historia:
Natalia nació en el reino de Ahystor en el seno de una familia adinerada y de larga tradición en el culto a Azura. Desde predicadores a altos sacerdotes, por la familia Lionheart han pasado todo tipo de personajes ilustres relacionados con el culto a la Diosa aunque ninguno de ellos paladín salvo su tatarabuelo Federick Lionheart, del que según los más viejos de la familia, se dice que tuvo algún tipo de relación con seres de linaje celestial.
Cuando por la familia corrió la noticia de que una nueva integrante llegaría en invierno todo fue alegría y festejo por la bebé, y más aún todavía cuando según visiones que tuvieron los padres de Natalia en sueños, esta sería una elegida de la Diosa, una paladina que traería la luz y la esperanza al reino.
Natalia fue criada desde pequeña con una severa y estricta educación para que cumpliera con el destino que auguraba esa visión. A la tierna edad de 8 años fue separada de sus padres para ingresar en el monasterio más importante de la ciudad, donde comenzó su entrenamiento religioso y militar.
Allí pasó su adolescencia sacando grandes notas en las pruebas a las que era sometida, pero también siendo castigada en multitud de ocasiones por no obedecer las órdenes al pie de la letra cuando consideraba que la orden no era del todo justa.
A medida que iba creciendo algunos rasgos iban desarrollándose en ella diferenciándola de los demás, como unos leves brillos metálicos azules en sus ojos, una piel brillante e inmaculada a la que parecían no afectar las cicatrices del entrenamiento y una extraña aura de paz y tranquilidad a su alrededor. Según sus mentores su sangre no era del todo humana y algún día descubriría sus secretos, pero para ello debería continuar su crecimiento espiritual.
Una vez finalizado su entrenamiento, siendo ya adulta, fue nombrada oficialmente paladina de Azura y destinada en una misión hacia la aldea Heystad, donde podría aplicar sus conocimientos en la reciente guerra contra los infernales, expandir el culto de Azura y quizás averiguar algo más sobre su linaje.
Código de conducta:
§ Protegeré al rey Valian y a mis aliados con mi vida. Son mi luz y mi fuerza, como yo soy la suya. Juntos prevaleceremos.
§ Buscaré y destruiré a los lacayos de Kravas y Vyrannus. Si no puedo detenerlos, daré mi vida intentándolo. Si mi vida fuera a ser desperdiciada en el intento, encontraré aliados. Si alguno cae por culpa de mi inacción, sus muertes cargarán mi alma, y me expiaré por cada una de ellas.
§ Seré generosa hacia los otros. No esperaré nada para mi misma, más que lo que necesite para sobrevivir.
§ Lucharé justamente cuando la batalla lo sea, y atacaré rápidamente y sin piedad cuando no lo sea.
§ Redimiré al ignorante con mis palabras y actos. Si no regresan a la luz, serán redimidos con mi espada.
§ No toleraré al mal, y lo combatiré con acero cuando las palabras no basten. No renegaré de mi fe, y no temeré a la vergüenza. Mi alma jamás podrá ser comprada ni por todas las estrellas en el firmamento.
§ Mostraré a los más desafortunados la luz de Azura. Viviré mi vida como su mortal filo, brillando con la luz de la verdad.
§ Cada día es otro paso hacia la perfección. No me volveré hacia la oscuridad.